Para Doña Marina Payans de Montolío (doña
Mima) formadora de cientos de modelos, fallecida este miércoles, la conducta que exhiba una modelo durante su
desarrollo profesional, dependerá de la educación que haya recibido en el hogar
y de la disciplina que le inculque la agencia y escuela encargada de su
formación.
Dijo, en
una entrevista realizada en Junio del año 2005 para el periódico Hoy por Rosario
Tifá, que muchas «chicas» podrían caer, sin proponérselo, en acciones
incorrectas influidas por factores de la época que se lo facilita la propia
sociedad.
Doña
Marina Payans de Montolío (doña Mima) formadora de cientos de modelos durante décadas, en su academia la Femme
Elegante, falleció el miércoles 13 de
octubre en su hogar de Santo Domingo, República Dominicana.
Los restos de doña Mima, como cariñosamente le
decían sus alumnos y allegados, fueron velados en la Funeraria Blandino, de la
avenida Abraham Lincoln y sepultados en el cementerio Jardín Memorial.
Le sobreviven a la señora Payans de Montolío, las modelos Lissette y Rossy Montolío Payans, quienes se han responsabilizado desde hace varios años de la dirección de la escuela de modelos.
Entre
los profesionales que se formaron en la escuela la Femme Elegante se encuentran:
Tayluma Minieur, Juan Carlos Ditren, Gissell Abreu, Amarilis García y Juan
Rojas.
En
Junio del año 2005 en una entrevista concedida al periódico Hoy, firmada por
quien escribe (Rosario Tifá), doña Mima Montolío aludía a la moral y la
disciplina que debían mantener los modelos antes y durante su carrera. A
continuación algunos párrafos extraídos de esa entrevista.
“La
conducta que exhiba un modelo durante su desarrollo profesional, dependerá de
la educación que haya recibido en el hogar y de la disciplina que le inculque
la agencia y escuela encargada de su formación, a juicio de una educadora en el
ramo con más de 30 años de experiencia.
Marina
Payán de Montolío, directora de la Femme Elegante, aseguró que estos parámetros
de conducta influirán en la o el modelo frente a cualquier propuesta indecorosa
que pueda recibir, de parte del agente o institución que contrate sus
servicios.
Payán
de Montolío, una dama que ha estado durante 31 años involucrada en la formación
de cientos de modelos dominicanos, exhorta a esos profesionales a mantener siempre
la cautela ante cualquier oferta interesada, que podría perjudicarles antes que
beneficiarlos.
Dijo
que muchas «chicas» podrían caer, sin proponérselo, en acciones incorrectas
influidas por factores de la época que se lo facilita la propia sociedad.
Por ese
motivo, los dueños de escuelas y propietarios de agencias «debemos profundizar
más en los objetivos fundamentales de esas instituciones que no es más que
educar, formar y desarrollar jóvenes capaces de asimilar e interpretar
correctamente los cambios que se producen en la sociedad».
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